Trabajar en un entorno adecuado a tus necesidades profesionales y personales es uno de los elementos más importante para tener éxito. Para muchos, el lugar de trabajo puede estar lleno de frustración y negatividad. Ahora más que nunca, los empleados priorizan un entorno laboral ideal al considerar sus oportunidades de ascenso o incluso su estrategia de salida.
Comprender la cultura y los valores del lugar de trabajo es crucial para mantener a los miembros del equipo felices, para poder escalar la empresa y contribuir de manera positiva a la industria en general. Las empresas pueden lograr un entorno de trabajo positivo al centrarse en su cultura empresarial, apoyar el crecimiento de los empleados y hacer que estos se sientan seguros y cómodos. ¿Conoces las características que ha de tener un entorno laboral saludable?
Empleados comprometidos y satisfechos
La característica principal de un entorno laboral saludable es una fuerza laboral colectivamente comprometida y satisfecha. Cuando los empleados tienen las herramientas que necesitan para tener éxito, participan activamente en el logro de los objetivos de la empresa y realmente se preocupan por sus clientes y el producto final, están preparados para prosperar y sentirse recompensados en el trabajo que realizan. Crear un entorno en el que los empleados encuentren significado en sus esfuerzos y sean recompensados por ir más allá, es el fundamento de un entorno laboral saludable.
Respeto mutuo hacia los individuos y la organización
Mantener una atmósfera de trabajo profesional es una de las claves de un entorno laboral saludable. Esto puede incluir desde un equilibrio favorable entre trabajo y vida personal, garantía de igualdad, respeto a la diversidad y un paquete salarial competitivo. El respeto, la transparencia y la comunicación son cruciales para que los empleados sientan que son valorados y que se escucha su voz.
Planes estratégicos a corto y largo plazo
Implementar planes estratégicos a corto y largo plazo es fundamental, no solo desde la perspectiva empresarial, sino también desde la perspectiva de la satisfacción de los empleados. Los empleados que se enfocan en objetivos generales, ya sea en un intervalo mensual o en un plan anual, encuentran motivación para esforzarse más, ayudar a sus compañeros de equipo y sentirse seguros de que forman parte de un entorno que ve el panorama completo.
Logro de objetivos comunes
Otra característica de un entorno laboral saludable es la unidad, donde los directivos y su personal comparten objetivos y metas comunes. Los intereses de cada empleado están comprometidos con la cohesión corporativa y el trabajo en equipo. Los objetivos desarticulados y las iniciativas aisladas pueden fracturar el sentido de colaboración y cooperación del equipo. Unificar un objetivo final une a los empleados.
Recursos optimizados
Los empleados que trabajan bien juntos y se sienten empoderados al hacerlo son el núcleo de un entorno laboral saludable, esto no es lo único que se necesita para satisfacer las necesidades del personal. Las organizaciones deben ir un paso más allá y asegurarse de que haya una infraestructura en su lugar para que los empleados puedan trabajr de manera que se sientan seguros, educados y cuidados. Estos recursos y provisiones pueden incluir desde capacitación en seguridad y prevención de lesiones, acceso a dietistas de bienestar corporativo, hasta programas que fomenten la salud mental y el bienestar.
¿Estás listo para garantizar un excelente entorno laboral?
Es responsabilidad de los líderes brindar apoyo y servicios para maximizar la salud y el bienestar de los empleados. Los empleadores proactivos pueden ofrecer servicios de bienestar integrales y personalizados a sus empleados, y todos salen ganando.
Si tu lugar de trabajo no supera la prueba de «salud», una corrección de rumbo no solo es posible, sino esencial. .