En este post os queremos hablar de algunos falsos mitos que se escuchan alrededor de la alimentación. Durante años nos los han repetido en múltiples ocasiones y queríamos desmentirlos:
Hay que suplementarse para conseguir un objetivo específico (ganancia de masa muscular, pérdida de grasa, salud intestinal…)
La verdad es que no. Antes de plantearnos tomar algún suplemento tenemos que ver varios puntos:
- ¿Estoy alimentándome con foco a ese objetivo?
- ¿Estoy ejercitándome enfocado a esa meta?
- ¿Qué tal estoy durmiendo? ¿tengo un sueño reparador?
- ¿Estoy controlando mis niveles de estrés crónico?
Solo si todas las respuestas son sí y aún así necesito un empujón, es momento de valorar qué suplemento me puede ir mejor. Y ojo! en el mercado hay una infinidad de productos que no sirven para nada. Asegúrate que lo que tomes tiene evidencia científica y es seguro.
El Instituto Australiano del Deporte clasifica los suplementos en 4 categorías de acuerdo a la evidencia científica y teniendo en cuenta consideraciones prácticas que determinan si un suplemento es legal, seguro y efectivo para mejorar el rendimiento deportivo (los del grupo A son lo que más evidencia tienen y los del grupo D los que menos). https://www.ais.gov.au/nutrition/supplements
El desayuno es la comida más importante del día
Ninguna comida es más importante que otra en sí misma. Lo importante es llegar a nuestros requerimientos nutricionales al final del día. Además, hoy en día no existe ninguna evidencia científica que demuestre que el desayuno sea la comida más importante del día.
Detrás de esta creencia está la industria de los ultraprocesados (cereales, galletas, bollería…) que vieron una oportunidad de mercado al hacernos creer que no podemos salir de casa sin comer alguno de sus productos.
Lo cierto es que para valorar si debo desayunar o no tengo que escucharme, ¿tengo hambre? Debes saber que no es obligatorio comer si no tienes hambre y sobre todo, prioriza calidad a cantidad. Por otro lado, obligarnos a comer cuando no tenemos hambre “porque toca” nos aleja de nuestro sensación de hambre-saciedad y volver a conectar con ella puede ser muy difícil.
Para adelgazar hay que comer 5 veces al día
Se decía que comer varias veces estimula el metabolismo. Esta creencia viene originada del pensamiento de que si meriendo no llegaré con tanta hambre a las comidas principales y es cierto que a algunas personas les puede funcionar, pero no a todo el mundo. Generalmente tendemos a sobrealimentarnos, así que adapta el número de comidas a tus horarios, estilo de vida y necesidades. Para adelgazar hay que llegar al final del día en déficit calórico y esto se puede conseguir tanto con 2 comidas como con 6.
Una copa de vino al día es saludable para el corazón
La ciencia ya ha desmentido este mito en múltiples ocasiones. Esta creencia que defendían muchos profesionales de la salud surge de unos estudios que demostraban los beneficios antioxidantes de la uva, pero en esos mismos estudios no estaban teniendo en cuenta la toxicidad del alcohol. Por lo tanto, si quieres incorporar antioxidantes a tu dieta, toma las uvas, no el vino. Innumerables estudios, organismos de la salud y profesionales de la salud recomiendan que cuanto menos alcohol se consuma, mejor y que la única dosis segura es cero.
Los carbohidratos engordan
No hay ningún alimento que por si solo engorde o adelgace. Lo que engorda es consumir más de lo que necesitamos (pero de cualquier alimento, no sólo carbohidratos). La cosa es que la mayoría de ultraprocesados suelen ser ricos en carbohidratos simples (y grasas de mala calidad) son hiperpalatables, no sacian apenas y son muy calóricos por lo nos hacen comer más y probablemente superar nuestros requerimientos calóricos y por tanto engordar.